Este fin de semana Frailes vuelve a acoger una de sus tradiciones más queridas: La Fiesta del Vino. Del 9 al 10 de mayo, la cultura y la gastronomía fraileras fueron las protagonistas en este encuentro. Acompaña a nuestros residentes, quienes con gran ilusión se han unido para disfrutar de esta comida en el recinto ferial de Las Eras del Mecedero.
Para conmemorar este día, queremos contaros un poco sobre sus orígenes y cómo comenzó todo. Esta es ya la XXVII edición de una celebración que se ha convertido en toda una tradición en nuestro pueblo.
Frailes, un rincón con alma en la Sierra Sur de Jaén, es mucho más que un pueblo: es el testimonio vivo de una historia rica y unas tradiciones que han pasado de generación en generación. Con calles que cuentan leyendas, paisajes que enamoran y una gastronomía que deleita, Frailes es el lugar donde la esencia andaluza cobra vida.
Desde sus emblemáticas fiestas, como la Semana Santa y la Feria de Agosto, hasta sus costumbres más auténticas como la elaboración del vino artesanal y el tradicional tapeo con amigos, este pueblo guarda el secreto de la convivencia y la alegría. Un paseo por su entorno natural, donde el sonido del agua y el aroma a olivares envuelven cada rincón, es una invitación a la paz y al disfrute.
Si alguna vez has sentido la magia de Frailes, sabes que aquí el tiempo se detiene para saborear la vida con calma y pasión.

Historia del Día del Vino
Los orígenes de nuestro querido Día del Vino se remontan a 1995, cuando el exconcejal José Luis Martín Afán de Rivera propuso al entonces alcalde Antonio Cano la idea de crear una Jornada Vinícola y Gastronómica. La que conoceremos popularmente como Fiesta del Vino.
Martín comentaba: “Las viñas se morían. Todo el mundo decía que el vino de Frailes estaba bueno, y yo pensé en darle también publicidad al pueblo”.
Así fue como se aprobó la propuesta, y el 25 de enero de 1997 se celebró la primera edición.
En sus primeros años, la jornada tuvo lugar en el extinto bar Avenida, propiedad de Antonio Martínez. En 2002, el evento se trasladó al recinto ferial de Las Eras del Mecedero. Una década después, en 2012, la celebración alcanzó los 2.200 comensales. Fue entonces cuando el equipo del exalcalde José Manuel Garrido propuso dar a conocer otros rincones con encanto del pueblo, como la Plaza de los Toros, con el objetivo de enriquecer y dinamizar el entorno local.
Ese mismo año, se decidió cambiar el nombre del evento, pasando de Fiesta del Vino a Jornada Vinícola y Gastronómica, y se amplió su duración a dos días. También se incorporaron nuevos productos locales, como queso, embutidos y dulces caseros, para potenciar la economía del municipio y fomentar la compra entre los visitantes. Así nacieron los stands, donde cada comercio ofrece productos elaborados artesanalmente.
Otra novedad fue la inclusión de actuaciones musicales para alargar la jornada y hacerla aún más amena tras la comida.
Así, año tras año, esta gran fiesta se sigue celebrando y continúa atrayendo a visitantes de pueblos cercanos e incluso turistas de fuera, llegando en ocasiones a igualar el número de asistentes con la propia población de Frailes.
Ahora solo nos queda disfrutar de la comida y la fiesta, recordando sus inicios y celebrando que esta gran idea haya perdurado en el tiempo… ¡y que lo siga haciendo por muchos años más!